La Delegación Territorial de Cultura de la Junta de Andalucía ha sancionado con 3.000 euros al Ayuntamiento de Vélez Málaga por ejecutar obras de reurbanización en la plaza de las Carmelitas sin la autorización previa del Gobierno autonómico, necesaria al encontrarse este espacio en el entorno de protección del convento de las Carmelitas, inmueble que está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC).
Así lo ha dado a conocer el portavoz municipal del PP, Francisco Delgado Bonilla, quien ha explicado que la ejecución de estos trabajos sin el correspondiente permiso de Cultura supone una vulneración de Ley de Patrimonio Histórico de Andalucía, “pues todos conocemos que el convento es un BIC y está protegido, por lo que cualquier obra en el entorno tiene que ser autorizada por esta Administración”.
Según ha detallado, en la resolución de la Junta se indica que el Ayuntamiento alega “que se ha producido un simple error de interpretación, sin ningún tipo de riesgo ni daño para el patrimonio histórico y sin ningún tipo de intencionalidad”, aunque la Administración deja claro que ninguno de esos argumentos puede permitir vulnerar la legislación vigente.
“Solamente solicitó el Ayuntamiento autorización para hacer las catas arqueológicas, pero no para la intervención, que se hizo posteriormente. Se recoge también en la resolución el inicio de las obras sin contar con esa autorización de la Administración cultural”, ha indicado el portavoz ‘popular’.
Para Delgado Bonilla, esta sanción, aunque es de pequeña cuantía, supone “un hecho grave y lamentable”, pues es “difícilmente entendible” que una Administración local no respete la legalidad vigente “cuando esa legalidad se le exige, de forma exacerbada a veces, a los vecinos dentro de los entornos de los BIC”.
Otras modificaciones
Al margen de las obras objeto de la sanción, Delgado Bonilla también se ha referido a otras actuaciones relacionadas con las obras en las Carmelitas que el PP va a poner en conocimiento de la Junta para conocer si se han ejecutado con la correspondiente autorización.
En concreto, se ha referido a unos trabajos que se ha llevado a cabo en los aledaños del convento y que han conllevado la eliminación de un pequeño escalón a la entrada de la iglesia y su sustitución por una rampa, “también alterando un elemento sustancial de ese edificio”.
